El mismo Etios de siempre ahora tiene motor más potente y caja manual de sexta, así que pedimos uno prestado para dar una vuelta. Por qué es uno de los modelos más recomendados.

Si alguno me escucha en Radio Mitre sabrá el desafío que implica hacer una crítica al Toyota Etios. Se trata de uno de los autos que menos me gusta en cuanto a diseño y sin embargo es uno de los que más recomiendo cuando me piden una opinión de compra. El Etios ya era una opción muy racional y este año Toyota le mejoró el motor, arregló el tablero y le puso caja de sexta. También le subió un poco el precio, pero bueno, todo no se puede pedir.

Para conocer los cambios del Etios 2016 pedimos prestada una unidad por un par de días y dimos unas vueltas. La versión es la XLS con caja manual, pero en su gran mayoría la crítica es válida para todas las versiones, ya que vienen con el mismo conjunto mecánico (tanto sedán como hatchback).

• Toyota Etios XLS sedán con caja manual de sexta
• Origen: Brasil
• Precio: $268.300
• Garantía: 3 años o 100 mil kilómetros.

Exterior

¿Es necesario hablar de la estética del Etios? Es curiosa la estrategia de Toyota, que sabe que el aspecto que más se le critica al Etios es, justamente, su aspecto. ¿Qué hizo Toyota? No le cambió nada -bueno, casi nada– en el diseño y le mejoró el motor y la caja. Es decir, reforzó lo que se consideraba sus fuertes en lugar de tratar de maquillar su apariencia.

¿Y cómo le viene saliendo esta jugada a Toyota? Por el momento más que bien, ya que en lo que va del año el Etios (se cuentan juntos el hatchback y el sedán) lleva patentadas 15 mil unidades, ubicándose entre el 7 y 8 lugar de ventas con un crecimiento del 19,7%, tres veces más que el promedio del mercado.

Es decir, que al consumidor argentino o le gusta el Etios o lo considera una muy buena opción de compra. Yo estoy entre los segundos, ya que las líneas demasiado rectas de esta versión sedán no me resultan atractivas. La chapa casi plana apenas dibuja una silueta y el frontal es tiene ese aspecto risueño algo matizado por el uso de cromados.

Atrás es todavía más sencillo y su despeje bastante alto respecto al suelo termina por completar un cuadro poco dinámico. Las que cambiaron fueron las llantas de esta versión XLS, por un nuevo diseño que es el encargado de dividir las aguas entre el viejo Etios y este Etios 2016.

Me parece que no vale la pena dedicarle más líneas al diseño exterior. El Etios es directo, frontal, con sus marcas de origen low cost y su propuesta de mucho espacio en pocos metros. La versión hatch y la aventurera Cross son un poco más lindas pero no tienen el enorme baúl del sedán.

Interior

Por dentro el Etios no cambio en lo esencial, pero mejoró lo que ya daba. Ese tablero central que poco gusta sigue estando ahí, al medio, pero Toyota cambió todas las agujas por una pantalla que tiene mucha mejor legibilidad, una de las críticas que le hicimos a la versión anterior. Además de estar lejos por la posición central, el tablero anterior se veía poco por el tamaño de algunos instrumentos y producía errores de lectura de acuerdo a cómo ubicábamos el asiento, ya que al no estar en el eje del conductor, el ángulo de visión cambiaba.

Ahora todo se resolvió con la pantalla que puede configurarse desde el volante para mostrar la información que más nos guste. Podemos elegir entre un tacómetro digital o los indicadores de consumos, entre otras opciones. Solamente permanecieron los testigos de bajo combustible, puertas abiertas, alerta de cinturones, freno de mano y los reservados a datos del motor.

El nuevo tablero está muy bien y mejora bastante la experiencia de manejo. La otra pantalla, la multimedia de 7″, ya había llegado el año pasado y también funciona bien, aunque no pudimos hacer funcionar Android Auto, una función que el fabricante indica como disponible (probablemente por el tipo de teléfono).

Lo que no cambió en el Etios es eso que solemos llamar «calidad percibida», que sigue siendo baja. Hay materiales que no podemos saber a ciencia cierta su calidad y sobre todo, su duración bajo un uso intenso como son los componentes de un auto, pero sí cómo se sienten. Es posible que los plásticos y telas del Etios duren muchos años, sin embargo se los percibe como baja calidad.

Con esto me refiero a los plásticos de las puertas y las zonas bajas, que tienen rebordes en algunos casos filosos; y los tapizados, sobre todo los de la contrapuerta, que brillan al sol por su alto contenido sintético. Es común bajarse del Etios sobrecargado de electricidad estática.

Hay otros detalles de terminación que nos recuerdan que estamos ante un auto low cost. Mencionaremos uno: el respaldo del asiento trasero se puede reclinar para comunicarnos con el baúl. Los pernos que salen del costado del respaldo para volver a fijarlo no tienen ningún tipo de ojal y se puede ver el relleno de goma espuma. Otro detalle que no nos gustó es que las luces no se apagan ni siquiera cuando sacamos las llaves.

Detalles de terminación, como los pernos del respaldo del asiento sin ningún tipo de cobertura u ojal.

Amplio baúl y debajo hay un auxilio de igual medidas que las otras cuatro ruedas, pero con llanta de chapa.

Ahora a lo positivo: el Etios es el auto de gama baja de mejor habitabilidad del mercado. Tiene muy buen espacio tanto adelante como atrás, donde pueden llegar a viajar tres adultos sin problemas y con todos sus equipajes, ya que el baúl del sedán es realmente amplio para su segmento (562 litros, el hatch tiene sólo 270).

Si la habitabilidad ya era buena, Toyota se puso las pilas y colocó tres cinturones inerciales de tres puntos atrás y también tres apoyacabezas. A esto le suma los anclajes isofix para poder colocar fácil y seguro una silla infantil. En un auto familiar, esto se califica con 10 puntos.

El resto del equipamiento no ha cambiado demasiado. Esta versión XLS levantavidrios eléctricos en las 4 puertas (conductor con one-touch), apertura eléctrica del baúl, espejos regulables eléctricamente con luz de giro, volante revestido en cuero, manijas color carrocería, antinieblas delanteros, llantas de aleación de 15″ (185/60 R15), entre otras cosas. La versión Platinum (superior) agrega algunos ítems necesarios como sensores de estacionamiento traseros y navegador satelital.

Resumiendo: el interior es bastante completo, con calidad de terminación tirando a media baja, la mejor habitabilidad del segmento y ha mejorado puntos importantes como la seguridad y la legibilidad del tablero, que ahora es digital.

Muy buen detalle: salida de aire para al guantera, que tiene muy buen tamaño. Viene de serie.

En marcha

Lo mejor del Etios 2016 está bajo el capó. Toyota le agregó al motor 1.5 16 válvulas la tecnología Dual VVT-i que ajusta continuamente el instante de apertura y cierre de las válvulas de admisión y escape. Esto redunda en mayor potencia (de 90 a 103 CV) y mejor consumo de combustible y emisiones de gases, cumpliendo la norma Euro 5.  El torque máximo llega a 137 Nm a 4.200 rpm, un 4% de aumento respecto al motor anterior.

Si a esto le sumamos la nueva caja manual se seis marchas (también viene una automática de cuatro), el resultado es una mejora notable. El cambio adicional le permitió a Toyota modificar las relaciones de la caja a partir de la cuarta. La típica maniobra de doblar una esquina en tercera se puede hacer sin inconvenientes, ayudados también por la mayor potencia.

La nueva mecánica mejoró mucho la performance, logrando hacer el 0-100 km/h en menos de 10 segundos y la recuperación de 80 a 120 km/h en cuarta marcha apenas toca los 11 segundos. La velocidad máxima llega a los 180 km/h.

La nueva caja, además de hacer más «elástico» el motor, permite mejorar los consumos sobre todo en autopista, ya que a 130 km/h el motor no pasa de las 3 mil vueltas. A esta velocidad consume alrededor de 8 litros cada 100km, pero a 100km/h (2.300 RPM) se contenta con sólo 6,5 litros cada 100/km, valores muy buenos. En ciudad apenas llega a los 9 litros cada 100 km.

El Etios 2016 es muy dinámico, se banca muy bien las calles en mal estado con su buen despeje y una suspensión que tira a blanda. La dirección tiene asistencia electrónica, con un muy buen radio de giro, que lo hace muy maniobrable en ciudad. Para la tierra, este mismo conjunto despeje-suspensión actúa muy bien y la insonorización es buena.

En ruta también es dinámico, como lo mencionamos anteriormente, y no es ruidoso sobre todo porque el motor viaja más relajado que en otros modelos. El tren delantero lo notamos algo inestable ante los vientos cruzados a velocidades arriba de los 120 km/h y al doblar rápido el auto se inclina un poco. Es decir, es una puesta a punto que busca el mayor confort para un auto que puede tener usos múltiples, menos el deportivo.

Llegando

El Etios ya era uno de los autos más racionales de nuestro mercado y Toyota decidió hacerle cambios que lo dejan aún más competitivo en la relación precio/producto. Sigue siendo un auto cómodo para toda una familia y ahora tiene mejor equipamiento de seguridad. Mejoró algunos puntos flojos como la legibilidad del tablero central y otros prefirió dejarlos para más adelante, como la estética o la calidad percibida.

A todo esto le agregó más potencia y mejoró los consumos gracias a modificaciones en el motor y la adopción de una caja de seis marchas, en lugar de la anterior de cinco. Por si fuera poco, ahora también se ofrece con caja automática de cuatro marchas, para el que necesite una auto de gama baja pero ya no quiera hacer más cambios.

Podrá gustarnos o no, pero el Etios sigue avanzando en nuestro mercado, que se va renovando y pide opciones más completas. No será el galán de la fiesta, pero viene ganando a base de argumentos sólidos. Una vez más, seguimos recomendando el Etios, aunque no sea el modelo que más nos guste.

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