Paradojas del mercado mundial de autos, cada vez hay más vehículos con aspecto de 4×4 pero pocos traen tracción en las cuatro ruedas. Considerados vehículos de lujo, no quedan por menos de $437.900.

Argentina es uno de los países con climas, suelos y geografías de los más variado en el mundo y por eso no es raro que las pickups como la Hilux sea un vehículo tan vendido como un Gol. Hay caminos de todo tipo y muchas veces la tracción en las cuatro ruedas es una necesidad que nada tiene que ver con la ostentación.

Paradojas del mercado mundial de autos actual, los llamados SUV’s (Sport Utility Vehicles, que engloba lo que antes conocíamos como 4×4) y crossovers (vehículos con aspecto de SUV) no paran de crecer. Pero cada vez menos de estos vehículos ofrecen versiones con tracción en las cuatro ruedas.

Como en tantos otros mercados, lo que importa es el aspecto y no las características reales. La gente los elige por la altura, la apariencia robusta y la remota ilusión de hacer travesías campestres. Sin embargo, la gente de marketing de las automotrices lo tiene bien estudiado: rara vez el usuario de estos autos lo saca fuera del asfalto.

En ese contexto, quien tenga una real necesidad de moverse todos los días por barro, nieve o arena, se encontrará que casi no quedan vehículos cerrados con capacidad de vérselas con un off-road real. Las pickups nuevas o usadas terminan siendo la única opción, y ello implica pasarse sí o sí al diésel y a motores de mayor cilindrada.

Para completar el panorama complejo para el que tenga necesidad de tracción integral, las marcas no ofrecen versiones básicas 4×4. Al parecer, alguien asoció las cuatro ruedas motrices con lujo y para comprar un vehículo dedicado al uso intenso hay que optar por uno que venga con tapizado de cuero y techo solar. En fin, esto es lo que hay.

Nota: casi ninguna propuesta viene con neumáticos de uso mixto (traen cubiertas para asfalto) por lo que queda en la capacidad de negociación del cliente conseguir que en el concesionario ofrezcan un cambio. 

Las 4×4 cerradas (no pickup) que quedan en el mercado

Renault Duster

De aspecto un tanto tosco, la opción más barata es una de las mejores si lo que se necesita es robustez. La Duster sería nuestra elección si necesitáramos un vehículo con tracción 4×4 cerrado y la facha fuera lo de menos. Muchas rutas de los rally cross country han sido hechas con camionetas Duster 4×4.

Hoy tiene una sola opción 4×4, con equipamiento Privilege y motor 2.0 naftero de 143 CV. Lo mejor: heredado de su relación con Nissan, Renault asocia la tracción en las cuatro ruedas con suspensión independiente multilink para las ruedas traseras. Es un plus de confort y desempeño en caminos con muchos desniveles.

En seguridad es muy básica, con ABS y doble airbag, sin posibilidad de agregarle nada. La falta de electrónica es justamente lo que hace interesante a la Duster 4×4 para quienes de verdad necesitan salir de apuros fuera del camino. Se puede seleccionar tres modos: tracción delantera, 4×4 a demanda (automático) y 4×4 Lock.

Sale $437.900.

Chevrolet Tracker

El caso de Tracker es curioso porque ofrece más versiones con tracción integral que simple. En total son tres, 1.8 N LTZ FWD (tracción delantera y caja manual de quinta), 1.8 N LTZ AWD AT (tracción integral y caja automática de sexta) y 1.8 LTZ+ AWD AT (igual con mayor equipamiento).

Todas traen el motor 1.8 naftero de 140 CV y 178 Nm de torque y la tracción es integral (AWD, All Wheel Drive), es decir, no puede desconectarse. El sistema automáticamente elige a qué ruedas manda más torque de acuerdo a la adherencia del piso, pero no puede bloquearse como en la Duster y EcoSport, algo muy necesario en un atasco grave. Es, en lo papeles, la menos preparada para un off-road extremo. Tampoco trae suspensión independiente en el eje trasero.

Viene muy equipada y su nivel de terminación es superior, acorde a su origen mexicano (es la misma que se vende en los Estados Unidos, aunque con distinta configuración).

Sale $444.900 la LTZ y $508.900 la LTZ+.

Ford EcoSport

La querida EcoSport acaba de renovarse (ver más) y por suerte no perdió la tracción en las cuatro ruedas. Hay una sola versión llamada EcoSport 2.0 Freestyle 4WD Automática . Al igual que Duster, es la única de la gama que trae suspensión trasera independiente son sistema multilink (heredada de la Escape). 

El motor 2.0 naftero GDI con inyección directa la hace una de las más potente del segmento, con 170 CV y 202 Nm de torque. En este caso se combina únicamente con caja automática de seis relaciones y convertidor de par.

Su renovación reciente la convierte en una de las que trae más tecnología abordo y su equipamiento en seguridad es destacable. La EcoSport 2.0 Freestyle 4WD (four wheel drive) viene con 7 airbags, control de tracción y estabilidad, entre muchas otras cosas.

La versión anterior tenía un sistema de tracción integral a demanda, que contaba con la posibilidad de bloquearlo para repartir el torque parejo a las cuatro ruedas, lo que ayuda en situaciones extremas. Suponemos que con el nuevo motor y la nueva caja el sistema es el mismo, pero no tuvimos posibilidad de probarlo.

Sale $498.000

Jeep Renegade

La marca más tradicional en off-road tiene una versión de su Renegade con tracción en las cuatro ruedas, aunque es carísima. El Renegade Latitude viene con motor 2.4 naftero de 190 caballos y caja automática de 9 marchas. Es posible que en el corto plazo se ofrezca la versión Trailhawk con motor 2.0 turbodisésel.

Es un Jeep y por supuesto es el más preparado un atasco, aunque no lo probamos. No sólo se puede bloquear la tracción en los dos ejes, sino que permite una desconexión total de la electrónica para vérselas cara a cara con el terreno.

Viene muy equipado y su precio es de $742.170.

Honda HR-V, Peugeot 2008 y Renault Captur: no tienen versión 4×4

En el segmento C hay más productos con tracción en las cuatro ruedas. Ford tiene al Kuga SEL AWD por $878.240, Chevrolet la Captiva LT 2.4 AWD MT por $689.20, Toyota la RAV4 4X4 TX $874.160, Hyundai la Tucson 4WD AT Full Premium por $946.560, Honda la CR-V ELX 4WD CVT por $970.000 y Jeep tendrá el Compass (se presenta esta semana). Son sólo algunas de los productos disponibles, ya que las marcas premium también tienen opciones en el segmento.

En el segmento D hay auténticos todoterrenos, como la Toyota SW4 hecha en Argentina que cuesta $892.300 en su versión 4X4 SR 2.8 TDI 6 M/T 5A.

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